Proverbios 28

Las hormigas, los conejos, las langostas y las lagartijas nos dan una ilustración significativa de las virtudes que todos podemos aplicar en la vida. Estos cuatro animales también nos demuestran cómo escapar del afán diario de las excusas. Estas cuatro criaturas comparten un dilema común: son relativamente pequeñas, débiles y fáciles de destruir. Pero estas especies continúan adelante porque cada una de ellas tiene una virtud particular que supera sus desventajas: la hormiga es diligente, el conejo es prudente, la langosta es cooperadora y la lagartija es útil.

Espero que estas criaturas interesantes le impulsen a vencer los desafíos que enfrenta y quizás hasta acabar con la tendencia que tenga de evitar las preguntas difíciles, de ignorar las advertencias de un amigo o de no aceptar la critica que pudiese ser benéfica. Cuando acepte sus debilidades y desafíos en vez de negarlos, de ignorarlos o de excusarse, se estará volviendo sabio. Cuando acepta las dificultades tiene la oportunidad de considerar alternativas, y con ello puede poner en práctica alguna de las cuatro virtudes que analizamos en la semana: diligencia, prudencia, cooperación y ayuda.

Utilice lo que ha aprendido esta semana. Esfuércese en enfrentar sus discapacidades (todos tenemos) y evite las excusas. Vivir más allá de ese afán diario comienza cuando uno acepta la realidad. Esto le dará la oportunidad de ser sabio.

Reflexión: Dedique unos momentos a analizar sus debilidades y desafíos. En el pasado, ¿ha tratado de ignorarlos o de excusarse? ¿Cuándo acepta sus obstáculos sin ninguna vergüenza?, ¿de qué forma eso cambia positivamente su perspectiva sobre la vida? ¿De qué forma esa aceptación de la realidad afecta su capacidad para realizar planes realistas?

Adaptado del libro, Viviendo los Proverbios  (Editorial Mundo Hispano, 2014). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmundohispano.org). Copyright © 2018 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.