En la búsqueda interminable de satisfacción, a veces nos convencemos de que la vida sería mejor si tuviéramos una carrera diferente. . . más educación. . . un nuevo cónyuge. . . un nuevo comienzo en otro lugar. La buena vida siempre está fuera de nuestro alcance.

Salomón descubrió que el llevar puesta la corona de un rey no le impedía vivir al borde del abismo. Se dio cuenta de que, aunque llegó a tenerlo todo, al vivir separado de Dios. . . en realidad no tenía nada.