La meta final está a la vista. Algún día, pronto, todo creyente comparecerá ante Dios. Él les dirá a los fieles: “Bien, siervo bueno y fiel” (vea Mateo 25:21 LBLA), ¡y será como si estuviera coronándonos con un laurel de victoria, una cinta de primer premio, una medalla de oro! En ese día Dios no … Lea más