Proverbios 23:15
Hijo mío, si tú corazón fuere sabio,
También a mí se me alegra el corazón.
Proverbios 23:15
Permítanme darles tres sugerencias prácticas a ustedes que son padres o madres.
Primero, determine sus prioridades. Pregúntese a sí mismo cuán alta está su familia en su lista de prioridades. ¿Cómo son sus hijos en particular, simplemente cuán serio es usted respecto al tiempo que pasa con cada uno de ellos? ¿Se lo ha dicho a ellos o a su cónyuge? . . .
Segundo, anote sus observaciones. Si un hijo o hija revela sus inclinaciones en la vida diaria, esas cosas valen la pena anotarlas. Lleve un diario de cada hijo . . . Al escribir, pida sabiduría en oración. Pida que Dios guíe sus pensamientos. Por favor, recuerde, cada hijo es singular. ¡Nada de comparaciones! . . .
Tercero, hable acerca de lo que encuentra. Los hijos anhelan conocerse mejor a sí mismos. Respetan su consejo, y recordarán por mucho tiempo sus comentarios. Sea cándido y sincero al ayudarles a «ver» quiénes son en realidad.
Adaptado del libro, Sabiduría Para el Camino: Palabras Sabias para Personas Ocupadas (Grupo Nelson 2008). Copyright © 2008 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.