Daniel 2:28
¿Cuál es tu papel cuando todo a tu alrededor tiembla?
Daniel no detuvo el colapso de la estatua, pero sí lo interpretó. No cambió el curso de los reinos, pero sí proclamó el Reino eterno. No se sentó en trono alguno, pero habló delante de reyes. Fue una voz clara en medio del estruendo, un testigo humilde en un escenario descomunal. Su secreto no fue influencia política, sino intimidad con Dios: «Hay un Dios en el cielo que revela misterioso» (Daniel 2:28, NBLA).
Tú y yo vivimos tiempos parecidos. Sistemas en decadencia. Instituciones que prometen seguridad, pero están llenas de fragmentación. La tentación es entrar en pánico… o guardar silencio. Pero Dios nos llama a ser como Daniel: voces entre colosos.
Ser «voz entre colosos» es ser lámparas en la noche (Filipenses 2:15, NBLA): orar, escuchar, servir y hablar cuando Dios abre puerta. No es gritar más fuerte, sino encarnar la esperanza más real. Cuando el mundo se tambalea, Cristo no. Cuando las narrativas cambian, Su evangelio permanece.
Pedro lo escribe de esta manera: «Estén siempre preparados para presentar defensa… pero con mansedumbre y reverencia» (1 Pedro 3:15, NBLA).
No necesitas tener todas las respuestas. Solo necesitas conectarte con el Dios que revela misterios, y hablar Su verdad con valentía y compasión. No para condenar, sino para invitar. No para señalar, sino para anunciar: El Reino viene… y ya está entre nosotros.
Cuando el mundo se tambalea, la voz del Reino no debe callar.
No necesitas ser coloso para ser relevante. Sé voz del Reino en medio de un mundo que se desmorona.
Adaptado de la guía de estudio, Daniel: God’s Plan for the Future, publicado por Insight for Living. Copyright © 2002 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.

