Pídale a Dios que se Haga Cargo

Romanos 5:3

También nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo
que la tribulación produce paciencia.
Romanos 5:3

Uno de los términos griegos que se traduce «tribulación» en el Nuevo Testamento se refiere a «presión . . . como aplastado bajo una piedra gigante». Esta es una descripción del dolor, de aguantar el dolor. Es una ilustración de la opresión de nuestros tiempos. Hay un cierto tipo de presión que viene del desempleo. Hay otro tipo de presión que viene con la amenaza de perder la casa. Hay una presión que viene de la calamidad, o un hijo descarriado, o un cónyuge que se ha ido . . .

¿Se interesa Dios por el número de cabellos en nuestro cuero cabelludo? ¿Se preocupa Él si una golondrina cae? Sí, su Palabra nos asegura que así es. Entonces tenga la seguridad de esto: Dios es especialista en las cosas que lo carcomen a usted por dentro; las cosas que usted teme mañana o la próxima semana; las cosas que le hacen preguntarse: «¿Cómo puedo concatenar esto?» La seguridad que Dios le da es esta: «Mira, yo me especializo en eso punto puedo tomar esa situación que tú has hecho una montaña, y puedo perforar un túnel a través de ella en cuestión de segundos. Tráemelo todo a mí. Pídeme que me haga cargo».