No tenga miedo. . . es solo su futuro (Parte 2)

La mayoría de nuestros miedos, independientemente de su objetivo específico, se reducen a una sola cosa: miedo al futuro. Se nos retuercen las entrañas al pensarlo: Pero ¿quién sabe lo que puede pasar?

Vista celestial en retrospectiva

Pero nuestro Dios invisible, en su providentia, continuamente, y con confianza, está obrando. Él nunca cambia. Él sabe qué es lo que se propone, y Él lo realiza con determinación implacable.

El secreto es la aceptación

Aceptación es tomar de la mano de Dios absolutamente cualquier cosa que Él da, mirando Su rostro en confianza y acción de gracias, sabiendo que el confinamiento del cerco en que estamos es bueno para Su gloria.

Una palabra bien escogida

¿Quién no ha quedado destrozado bajo el peso de una palabra mal escogida? Y, ¿quién no ha recibido valor fresco debido a una palabra de esperanza que penetró la duda propia? El término palabra sigue siendo uno de los más poderosos.

Honestos hasta la médula

¿Qué es lo que Dios está buscando? Está buscando hombres y mujeres cuyos corazones sean completamente de Él: por completo.

Dos son mejores que uno

La independencia es nuestro estribillo y «piensa con tu propia cabeza» es nuestro lema. Declarar una necesidad es señal de debilidad, una admisión abierta de fracaso y falta de carácter. Es más, nos movemos tanto, ¿qué quién tiene tiempo para conversar e interesarse?

A solas con Dios

A veces simplemente estar a solas en la maravillosa creación de Dios es todo lo que se necesita para que las escamas caigan de los ojos de uno y para que uno silencie el hostigamientos y el ruido de su día y empiece a oír a Dios.

Dándole a Dios el primer lugar

Si su carrera, sin embargo, es simplemente una parte del plan de Dios y usted la mantiene en la perspectiva apropiada, usted puede hacerle frente a una degradación tan bien como a una promoción. Todo depende de quién es primero y lo que es primero.

La mano de Dios en su vida

Usted tal vez haya llegado a un hogar que sufría estrechez económica. Tal vez haya conocido quebrantamiento, heridas e inseguridad desde sus primeros días; pero, por favor, óigame en esto: Usted no fue un accidente.