Éxodo 3:4-22

Moisés había sido muy testarudo durante 40 años, diciéndose a sí mismo todo ese tiempo que la suya era una causa perdida. Por eso, cuando Dios vino a él con un llamamiento directo y sencillo, el viejo pastor no supo qué hacer. En realidad, no se permitía a sí mismo creer que todavía podía ser útil para Dios. «Pero ahora, ve, pues yo te envío al faraón para que saques de Egipto a mi pueblo, a los hijos del Israel» (Éxodo 3:10).

Eso no era difícil de entender, ¿verdad? El Señor habló en un idioma que Moisés podía entender. La orden que le dio fue doble y sencilla: Primero, «Yo te envío». Y segundo: «Tú sacarás a mi pueblo». Ese era el plan.

Observe, por favor, que este no era un plan que ofrecía alternativas. No era siquiera una invitación. Era un llamamiento. Dios no habla para pedirnos nuestra opinión en cuanto a sus planes. Dios hace declaraciones. Él no comienza teniendo una conversación o a manera de intercambio de ideas. Tampoco convoca a un grupo selecto de consultores para que le sugieran las opciones viables.

Él habla, y punto.

En ocasiones muy especiales de nuestra vida, Dios nos dice: «Ahora, hijo mío, tengo esto en mente para ti. Sé que en el pasado enredaste las cosas. Y también sé que es posible que vuelvas a hacer lo mismo en el futuro. Pero en lo que concierne hoy en día, en este momento, este es mi plan para ti. Ahora ve. Yo te estoy enviando, y estaré contigo».

Dios le dijo a Moisés que él sería un instrumento en la liberación pero que él, o sea, Dios mismo sería el libertador; y en esto hay una gran diferencia. En el llamamiento de Dios, Él tiene un plan; pero el Señor nunca espera que sea usted quien lleve a cabo ese plan. Es él quien lo va a realizar. Él simplemente quiere que usted sea el instrumento de acción. A fin de cuentas, es la reputación de Él, no la suya, la que están en juego. Lo único que pide el Señor es que usted se entregue a Él como una herramienta que Él pueda tomar y usar. Esto es todo.

Adaptado del libro, Buenos Días con Buenos Amigos (El Paso: Editorial Mundo Hispano, 2007). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmh.org). Copyright © 2019 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.