Job 42: 1—11

Los planes de Dios están más allá de nuestra comprensión, y son demasiado profundos de explicar. Quizás Dios no nos explica lo que hace, porque el conocer y entender su modo de actuar no nos ayudará mucho. Deténgase y hágase esta pregunta: ¿Ayuda, en realidad, el conocer el porqué de las cosas? ¿Desaparece el dolor cuando se conoce su causa? vivimos en un mundo lleno de catástrofes devastadoras; de francotiradores que disparan indiscriminadamente; de grandes aviones que se estrellan contra altos edificios; de ancianos que son envenenados deliberadamente en las residencias para la tercera edad; de violadores y asesinos en serie; de madres que matan a todos sus hijos; De hambrunas y de sequías; de esposas que arrollan con sus automóviles a sus esposos; de predicadores hipócritas y fraudulentos; de altos ejecutivos que se aprovechan injustamente de sus empleados. la lista es interminable. ¿Cómo es posible que Dios permita estas cosas? ¿Ayudaría, en realidad, saber la razón? En un mundo caído, lleno de personas depravadas que llevan a la práctica sus peores pensamientos, ¿cambiaría eso el pecado?

Iré un poco más allá. Quizás Dios no nos explica lo que hace porque somos incapaces de comprender sus respuestas. Puesto que él vive en una esfera que es totalmente diferente a la nuestra, más allá de nuestra comprensión, y la nuestra es tangible, limitada por el espacio y el tiempo, dentro de los rígidos límites las leyes físicas, ¿cómo podríamos entenderlo? Ninguna de nuestras limitaciones se aplica a él; por lo tanto, ¿qué nos haría capaces de entender su plan?

Lo que nos molesta es que él no actúa como nosotros pensamos que debiera actuar. Él no hace lo que nuestros padres terrenales habrían hecho en circunstancias parecidas. Cuando pienso en esto, ¿dónde estaba Dios cuando su hijo fue crucificado? Para sorpresa de muchos, él estuvo todo el tiempo llevando a cabo su plan divino para nuestra salvación. Mientras se desarrollaba el proceso, los propios discípulos de Jesús no lo entendieron, en ese momento eran las personas más desilusionadas del planeta. ¿Recuerda que estaban pensando? Se estaba preguntando cómo fue que pudieron creer un engaño. Desde su perspectiva, la muerte de su maestro no tenía ningún sentido.

¿Sabes lo que Job ve finalmente? Job ve a Dios, y eso es suficiente. No ve las respuestas. Está en el punto donde no necesita respuestas. Ha tenido un destello del Todopoderoso, y eso es suficiente. ¿Ha tenido usted un destello de su gloria?

Adaptado del libro, Buenos Días con Buenos Amigos (El Paso: Editorial Mundo Hispano, 2007). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmh.org). Copyright © 2019 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.