Salmo 65:9, 11
Visitas la tierra, y la riegas; . . .
Tú coronas el año con tus bienes,
y tus nubes destilan grosura.
Salmo 65:9, 11
En alguna parte, a kilómetros de distancia, los sembríos siguen su camino hacia la cosecha, y las olas rugen y se estrellan contra la playa. Bosques barridos por el viento entonan sus cantos eternos, y los animales del desierto corren por las sombras de cactus y rocas.
En cuestión de horas caerá la noche, y el cielo oscuro relucirá con luna y estrellas, y el sueño se impondrá sobre nosotros. La vida continuará sin interrupción. Apreciado o no, la obra de la naturaleza seguirá siendo pintada por las manos de Dios . . .
En medio del ruido ofensivo de nuestro mundo moderno: la gente, los coches, los ruidos, la contaminación atmosférica, el calor, las presiones, allí están esos recordatorios de su paz profunda.
Adaptado del libro, Sabiduría Para el Camino: Palabras Sabias para Personas Ocupadas (Grupo Nelson 2008). Copyright © 2008 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.