Job 42: 10—17

Un gran objetivo de los cristianos sanos y saludables es la esperanza de alcanzar la madurez antes de que la muerte se presente. Le diré, sin vacilación alguna, que uno de los grandes objetivos de mi vida es crecer en madurez a medida que me vuelvo más viejo. Unas excelentes palabras grabadas en una lápida serían: «Aquí yace un hombre que se mantuvo creciendo a medida que seguía envejeciendo». Madurar y envejecer necesitan ir de la mano. Pero tenga esto por seguro: la madurez es un proceso lento y penoso. Job lo logró; alcanzó esa meta. No es de extrañar que leamos que murió anciano y lleno de años. Vivió el resto de sus años (140 más) lleno de entusiasmo y pasión. ¡Qué manera tan envidiable de llegar al final de la vida!

Tenemos dos alternativas cuando se presentan las dificultades: Podemos verlas como una intrusión, un atropello, o como una oportunidad para responder con obediencia concreta a la voluntad de Dios y con esa severa virtud qué Santiago llama «paciencia».

La paciencia no es una resignación a regañadientes ni un consentimiento pasivo. Es «una larga paciencia en la misma dirección». Es mantenerse en la senda de la obediencia a pesar de todas las indicaciones en contrario. Es la tenaz determinación de buscar la santidad cuando las condiciones de la santidad no son favorables. Es la decisión, en medio de nuestro sufrimiento, de hacer lo que Dios nos pidió que hiciéramos, lo que haya sido, y por él tiempo que él nos pide que lo hagamos. Como escribió Oswald Chambers: «Elegir el sufrimiento no tiene sentido en absoluto; elegir hacer la voluntad de Dios en medio de nuestro sufrimiento es lo más sensato del mundo.

¿Dónde se encuentra usted hoy? ¿A dónde le está conduciendo el viaje que está haciendo? Más importante aún, ¿qué opción ha elegido? ¿Está viendo su prueba como un atropello o como una oportunidad? Haga el esfuerzo de no olvidar las lecciones que Job nos enseña sobre nosotros mismos. Eso hará un cambio significativo en su vida. A medida que usted avance en edad, siga creciendo en madurez; y, en vez de simplemente leer sobre la vida de Job, comience a vivir esa clase de vida.

Eso sería lo más sensato del mundo, ¿no le parece?

Adaptado del libro, Buenos Días con Buenos Amigos (El Paso: Editorial Mundo Hispano, 2007). Con permiso de la Editorial Mundo Hispano (www.editorialmh.org). Copyright © 2019 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.