Proverbios 23:4

No te afanes por hacerte rico;
sé prudente, y desiste.
Proverbios 23:4

Para sorpresa de muchos, la Biblia habla bastante en cuanto al dinero. Habla en cuanto a ganar y gastar, ahorrar y dar, invertir e incluso desperdiciar nuestro dinero. Pero en cada uno de estos pasajes ni siquiera se acerca a sugerir que el dinero da seguridad última . . .

Si hubiera un gran mensaje que pudiera dar a los que luchan con no tener abundancia de los bienes de este mundo, sería esta promesa sencilla y sin embargo profunda de felicidad. Por un momento, vayamos al revés, de derecha a izquierda.

Eso que constituye gran riqueza no se relaciona con el dinero. Es una actitud de satisfacción («ya basta») acoplada con paz interna (una ausencia de retorcerse) más un andar con Dios día tras día, momento a momento. Suena muy sencillo, tan fácil, tan bueno ¿verdad? En nuestro mundo de más, más, más . . . empuja, empuja, empuja . . . empuña, empuña, empuña, este consejo debía haberse dado hace mucho. En una palabra, el secreto es contentamiento.

Adaptado del libro, Sabiduría Para el Camino: Palabras Sabias para Personas Ocupadas (Grupo Nelson 2008). Copyright © 2008 por Charles R. Swindoll, Inc. Reservados mundialmente todos los derechos.