Dios no sonríe debido a la muerte y resurrección de su Hijo. Es gracia, amigo mío, sublime gracia.
1 Pedro
El peso de la preocupación
Qué maravilloso que Dios personalmente cuide de las cosas que nos preocupan y llenan nuestros pensamientos. Él se preocupa por ella es más de lo que nosotros nos preocupamos.
Aprendiendo humildad
Solo «actúe mediano». Sea confiable, honesto, reflexivo y realista. Sin importar su posición elevada o la gran cantidad de honores, grados o logros que tenga, siga siendo usted mismo.
Convertir la Amargura en Dulzura
El libro de Hebreos dice que una «raíz de amargura» puede surgir y causar problemas (12:15). Es un hecho que nadie puede alimentar la amargura y al mismo tiempo tratar de ocultarla. A veces pensamos que podemos ocultar nuestra amargura, pero no podemos. Y lo que es peor, usted la víctima de la amargura, será el más miserable.
El crisol
Al convivir con las pruebas de la vida y las tentaciones; al permitirles que entren a nuestro mundo privado y que generen la peculiar cualidad de la perseverancia, nos convertimos en personas con un carácter maduro.
Descansando en silencio
Si fuese por nosotros, optaríamos por los extremos casi todo el tiempo. Eso explica por qué la Palabra de Dios con frecuencia nos pide moderación y autocontrol, suavizando nuestras cortantes vidas con muchas curvas peligrosas que nos obligan a disminuir la velocidad.
Patriotismo
Hasta que no nos demos permiso a nosotros mismos de ser las personas únicas que Dios diseño que fuésemos y hacer las cosas impredecibles que su gracia nos permite hacer, vamos a seguir marchando en el círculo de temor, timidez y aburrimiento.
Abigail: Salvar el cuello del esposo
Bueno, los caminos de Dios son misteriosos. Pero no pensó eso. Inmediatamente puso un plan en acción que protegería a su esposo de daño, no porque lo mereciera o porque era bueno, sino porque ella era buena. Dios estaba obrando en el corazón de esta mujer. A pesar de la estupidez de su esposo, Abigail eligió ser fiel en su papel como esposa.
Por qué los hombres no lideran
Muchas iglesias y hogares cristianos tienen hombres pasivos pero pocas veces hablamos de ello de manera directa. ¿Por qué algunos hombres, en vez de dirigir, se han alejado y enmudecido frente a sus esposas, sus familias y sus iglesias?
Lectura, Primera parte
La lectura nos amplía. Ella satisface esas inquietudes que se hayan muy por dentro. Nos dirige por territorios desconocidos que normalmente no exploraríamos.