Un hermoso equilibrio

Empiece con la vida (y estilo de vida) de Jesucristo. . . La suya fue una vida de hermoso equilibrio. Él realizó todo lo que el Padre le envió a hacer. Todo. Y lo hizo sin ignorar las ocasiones esenciales de ese tiempo libre reposado.

Prioridades para padres

Los hijos anhelan conocerse mejor a sí mismos. Respetan su consejo, y recordarán por mucho tiempo sus comentarios. Sea cándido y sincero al ayudarles a «ver» quiénes son en realidad.

Buscando el éxito

Cada año docenas de libros y revistas, veintena de cintas de audio y vídeo, y centenares de seminarios ofrecen ideas, motivación, técnicas y promesas de prosperidad.
Curiosamente, sin embargo, pocas hablan de lo que la mayoría de las personas quieren (pero rara vez hallan) en su búsqueda del éxito: contentamiento, satisfacción, realización y alivio.

No hay lugar para el orgullo

Aquel que es verdaderamente desprendido es generoso con su tiempo y posesiones, energía y dinero. Conforme eso se expresa, se demuestra de varias maneras, tales como sensibilidad y gentileza, un espíritu sin pretensiones, y liderazgo de corazón servidor.

Deje que Dios haga la exaltación

David no buscaba el éxito; simplemente se humilló bajo la poderosa mano de Dios, estando cerca al señor y sometiéndose a Él. Y Dios exaltó a David al cargo más alto en la tierra . . .

Lloramos y oramos, crecemos y aprendemos

Es mucho mejor que abramos las puertas de nuestros corazones y recibamos las pruebas ordenadas por Dios como invitadas de honor por el bien que hacen en nuestras vidas.

Siga buscando

Debido a que algunos se preocuparon lo suficiente como para soñar, para buscar, para persistir y completar su búsqueda, nuestras vidas son más cómodas, más estables.

El gran don de la fidelidad

Uno siente como si fuera un mojigato, el único que no se está divirtiendo. No se engañe por la persuasión, por hermosas y atractivas que puedan sonar las palabras. Es una mentira.

La esperanza es más que soñar

Esperar es tener expectativa. Sin embargo, es más que soñar. Es poseer dentro de nosotros mismos la expectación de que algún día ese deseo se realizará. La esperanza siempre mira al futuro, y siempre está de puntillas. Nos mantiene avanzando.