Mientras David considera el impacto de la comunicación escrita de Dios en la segunda sección del Salmo 19, él siente el impulso de elogiar el valor de la Escritura.
Salmos
Dios no está callado
Los cielos pueden declarar el poder y la gloria de Dios pero no nos declaran Su voluntad, Su plan y Su promesa de salvación. Dios ha comunicado esas maravillosas verdades únicamente en su Palabra, la Biblia.
Dios habla a través de su creación
David comprimió una gran cantidad de teología en un espacio muy pequeño del Salmo 19. Desafortunadamente, solo podemos enfatizar algunos aspectos importantes de estos catorce versículos ya que el tiempo o el espacio no nos permiten profundizar en cada uno de ellos.
Un silencio ensordecedor
¿Alguna vez se ha sentido completamente alejado de Dios? Es como cuando uno se encuentra en el primer peldaño de una escalera larga y mira hacia arriba, ¿no es cierto? Es como cuando uno llega a una casa, encuentra las luces apagadas y aunque uno toque a la puerta, nada sucede. Nadie responde. No hay ninguna reacción.
Seguro en Dios
Los creyentes que llevan su vida bajo el control del Espíritu Santo disfrutarán una sensación de estabilidad a pesar del mundo caótico y tambaleante que les rodea. Ellos pueden vivir una vida sólida y estable.
Integridad en las relaciones
La canción de David explora las características de una persona que disfruta la comunión con Dios en esta vida junto con siete facetas más de integridad. Considere cada una de ellas y vea el énfasis que Dios tiene sobre las relaciones.
Comunión con Dios
Si usted lee el Salmo 15 cuidadosamente, descubrirá que toda la canción surge del primer versículo. El versículo 1 es crucial debido a su pregunta de sondeo. La respuesta de David conforma el resto del salmo y finaliza con una promesa maravillosa.
La norma de vida de Dios
Este salmo trata con esas obras de justicia promovidas por el Espíritu Santo mientras caminamos en dependencia total de nuestro Dios. Cuando estas cosas comienzan a disiparse de nuestras vidas, nuestra integridad inevitablemente se debilita y finalmente dañamos nuestro testimonio.
Una canción de esperanza renovada
La debilidad no es un síntoma de una enfermedad terminal. Es una prueba tangible de nuestra humanidad. Mejor aún, es la plataforma donde Dios realiza parte de su trabajo más maravilloso.
La mirada en Dios
Algo le ocurrió a David entre la segunda y la tercera estrofa de este himno. Quizás analizó sus propias quejas y se dio cuenta de que era simple autocompasión. Yo he hecho eso, ¿y usted?