Liderar

Es útil recordar que Dios nos llama «peregrinos y extranjeros» (Hebreos 11:3). En otras palabras, personas nómadas, que viven en tiendas de campaña, sueltas y dispuestas, listas para caminar en cualquier momento, dispuestas a romper el molde—cuando sea y donde sea que Dios dirija. A pesar de las circunstancias.

La santidad de Dios, nuestra necesidad

En un mundo que ya está lleno de ego, personas que viven impresionándose mutuamente, y que se han separado del único Santo, merecedor de alabanza, debemos darle un vistazo a Él en Su incomprensibilidad. Él es nuestro Dios infinito.

La gratitud por la guía de Dios

No hay un cristiano que esté leyendo estas palabras que no haya pasado por ese sendero o haya tenido dificultad para convencer a los demás de que lo que está haciendo es correcto. Muchos cristianos han soportado las miradas de desaprobación y quizás hasta el consejo bien intencionado de aquellos que nos dicen que no es buena idea

Venciendo el temor

El Salmo 23 de David le habla directamente al temeroso. Mediante trazos grandes de su pluma, el pastor convierte nuestros huesos en acero. David se enfrenta a temor con una sencilla declaración: «Aunque pase por el valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo». (Salmos 23:4)

Una oración por los padres

Durante los siguientes minutos, quiero pedirle que piense en su padre. Medite en lo que ha contribuido en su vida. Piense en la influencia que ha tenido en su persona y lo que el invirtió en usted; piense en sus consejos. Analice su rostro . . . aquella imagen que tiene grabada en su mente. Escuche nuevamente el eco de su voz . . . aquella risa contagiosa . . . aquellas expresiones singulares que surgen a través de los recuerdos.

La familia

«DEDIQUE TIEMPO». Esa frase me hace pensar ocasionalmente en los cumpleaños, los aniversarios y especialmente los días festivos. ¿Alguna vez se ha detenido a pensar en la importancia de dedicarle tiempo a su familia? Si no lo ha hecho, hágalo.

Valor para el desalentado

Hay una mosca en la sopa de la decepción. Nosotros la hemos puesto allí. De modo que no hay nadie más a quien culpar sino a nosotros mismos. Deténgase a pensarlo un momento. ¿Qué es lo que hace que nos decepcionemos? Que nosotros ya lo teníamos figurado en nuestras mentes y habíamos anticipado cierto resultado o una respuesta que nunca se materializó.

Los porqué de la vida

El Señor no estaba ausente. Por el contrario, Dios tenía todo el control. David enfrentó la prueba y rehusó tirar la toalla. ¿Cómo lo hizo? Lo hizo recordando que Dios todavía es soberano.

Facetas de integridad

por Charles R. Swindoll1 de agosto, 2024

«¿Es usted una persona chismosa? ¿Disfruta usted internamente de escuchar o de decir cosas que manchan la reputación de otra persona? Es interesante que cuando leemos la lista de las siete cosas que Dios aborrece en Proverbios 6:16-19, tres de ellas tienen que ver con la lengua».