Donde el Dolor Guía

Al igual que estos dos discípulos, cuando nos enfrentamos a la realidad de nuestros corazones carnales, nuestra culpabilidad nos lleva a una de dos direcciones.

La Iglesia, Primera parte

Cuando usted mastica ese pensamiento por un tiempo suficiente, usted comienza a darse cuenta de que la iglesia es el yunque impermeable, y todas estas cosas calientes, sin importar cuán impresionantes y ruidosos e intimidantes sean, al final se enfriarán y serán reemplazadas.

¿Quién es el delincuente?

«Esta generación joven. . . ¿en qué acabará esto?»
¿Pero podemos estar seguros de que la culpa es solo de ellos?
¿Seremos menos culpables los que ponemos en su camino
tantas cosas que los hacen desviar?

Relevancia

El Evangelio sí debe penetrar de manera cortante en cada generación como una espada resplandeciente, afilada en la piedra de la Escritura, templada en el horno de la realidad y la necesidad.

El panorama grande

Tengo la impresión de que un día, cuando se sumen los resultados mientras estemos parados delante del Señor, muchos de nosotros desearemos haber actuado con más riesgo. . . y haber dedicado menos tiempo a perseguir solo los detalles.

¿Es terminal el trauma?

Descargue. Suelte la carga y déjela caer en Su regazo. . . ahora. Permítale llevarse el estrés suyo y reciba usted el descanso de Él.

Un regalo extendido

No es demasiado tarde para dar algunas cosas esta Navidad. No solamente el día de Navidad, sino durante los días posteriores al 25 de diciembre. Podríamos llamar a estos regalos diarios «nuestros proyectos de Navidad».

Luz Brillante, Luz sin Par

El viaje de los Magos del Oriente de Babilonia a Belén, dirigidos por la estrella se convierte en un increíble capítulo más de la venida de Dios en forma humana.

Sentirse querido, Segunda parte

Muestre gracia en vez de irritarse. Recuerde que esas características superficiales probablemente son un pobre intento de protegerse. Una respuesta con gracia y bondad puede a menudo desenmascarar la persona «verdadera» que hay muy por dentro.

Los ídolos, Primera parte

No tengo muchas tentaciones para adorar a cosas malvadas. Son las cosas buenas que me dan problemas. No me es tan difícil rechazar algo que en sí es malo o incorrecto como lo es mantener las cosas buenas y saludables fuera del trono. Allí es donde se encuentra, creo yo, la línea de batalla.