Ajustes radicales, Segunda parte

Si Cristo no hubiera tomado un paso drástico, pecadores como nosotros nunca hubiéramos sobrevivido la caída del hombre. Nunca hubiéramos sido rescatados. Hubiéramos sido perdidos para siempre. La cruz fue la increíble respuesta de Dios a nuestro dilema extremo. Cristo hizo algo radical.

Ajustes radicales, Primera parte

Por ahora, entregue al Señor ese paso radical que usted cree que Él quiere que tome. Al hacerlo, escuche las palabras de Él a Su siervo en Josué 1:9.

La innovación, Segunda parte

Hay algo que es aún más difícil. . . y eso es cambiar. Es reconocer una necesidad, ser lo suficientemente honesto y humilde como para enfrentar los hechos, y tener la confianza para considerar ideas, métodos y aparatos nuevos, como para poder superar la situación. Tragar nuestro orgullo no debiera ser tan difícil, siendo que eso es lo que comemos todo el día.

La innovación, Primera parte

Me da a entender que existen bastante más personas innovadoras (que hoy solo se consideran personas de «baja categoría») de lo que cualquiera de nosotros puede imaginar. De hecho, ¡es muy posible que usted sea uno de ellos. Mañana vamos a explorar eso. Pueda que se sorprenda con lo que vaya a descubrir.

El dolor

He intentado, sin éxito, encontrar, sea en las Escrituras o en la historia, un personaje de voluntad resoluta que Dios haya usado grandemente sin que primero Él le haya permitido ser herido profundamente.

La sombra del gigante, Segunda parte

Para ser un guerrero de Dios, para pelear a Su manera, demanda mucha más habilidad y control de lo que uno pueda imaginar. Usar la honda y piedra del Espíritu es algo mucho más delicado que golpear con el palo de la carne.

La sombra del gigante, Primera parte

Sus sonoras amenazas atravesaban el valle con regularidad escalofriante, produciendo el resultado deseado: temor. El registro sagrado nos informa que esos ruidos monótonos salidos de la boca del gigante sonaron cada mañana y cada anochecer por cuarenta largos días.

El llamado desde una cueva

¡Animo! Si David pudo manejar una cueva llena de bravucones, usted puede apretarse el cinturón y enfrentar el desafío que tiene en su propia cueva. ¿Necesita fuerzas? ¿Paz? ¿Sabiduría? ¿Dirección? ¿Disciplina? ¡Pídalo! Dios le escuchará. Él da atención especial a los gritos que proceden de cuevas.

Empiece allí donde está, Segunda parte

Si Dios puede tomar a un profeta desobediente, hacerle dar un giro completo y encenderlo espiritualmente, Él puede hacer lo mismo con usted. Él es un especialista en convertir en útil y hermoso algo que estaba roto y confundido.

Empiece allí donde está, Primera parte

Cambiar de dirección requiere saber dónde usted se encuentra. Es necesario tomar tiempo para admitir con honestidad su situación actual. Significa que hay que enfrentar la realidad, pararse solo dentro del pez y ponerse a cuentas con aquellas cosas que necesitan atención, buscando un fósforo en medio de las algas marinas. Antes de encontrar la salida, usted debe determinar en dónde se encuentra.